Voy parando balas y puñales,
con la fuerza de un revolver
que va pisando cristales.
Voy bailando, rota, entre cenizas
siendo fuego, para quemarlas todas
La mala suerte de ser valiente
a veces te rompes. O te rompen.
Que aún hechas polvo
lo arriesgamos todo.
Me desgarro la garganta
en momentos sencillos
y me deshago la piel en dar cariño.
La sonrisa es mi curva más constante,
la más natural,
y las pupilas se me hacen marea
siendo real, un tsunami emocional.
Soy impulsos incontrolables,
atrevidos, incluso intolerantes
latidos que buscan libertad.
Me entrego y amo mucho
inocente de mí,
pero siempre reiterada en el riesgo
que supone darse al resto.
Alma liberal que lucha por ser libre
marea verde que avanza a golpes creando fuerza invencible.
Y estando rota,
mientras suenas cristales
y sabes a pena
te vas volviendo de hierro.
Siendo valiente,
vives momentos, eres personas
amas lugares y sobre todo eres hogar.
Voy parando puñales y balas,
bailando de madrugada
comiéndome las ganas
riendo y queriendo a bocanadas.
Nunca dejéis de soñar, no paréis de luchar.
Hasta muy pronto valientes.
Silvia Soñadora